Creía que compartía muy poco con el posmodernismo. Por supuesto que lo mío no era el romanticismo, pero sí el modernismo. La idea de progreso y racionalidad me parecían un signo de mi persona. Pero la lectura del esclarecedor texto de Gergen me hizo cambiar de opinión.
El autor sostiene que las nuevas tecnologías nos permiten mantener relaciones directas e indirectas con una enorme cantidad de personas y ello produce una saturación social. Como consecuencia, también aparece una colonización del yo. No voy a hacer aquí una síntesis del libro, que recomiendo leer a todo aquel que busca una análisis preciso de los rasgos de la sociedad posmoderna.
Hoy tengo claro que soy tan posmoderna como cualquiera. Acá dos frases que me ayudaron a entenderme un poco más:
El autor sostiene que las nuevas tecnologías nos permiten mantener relaciones directas e indirectas con una enorme cantidad de personas y ello produce una saturación social. Como consecuencia, también aparece una colonización del yo. No voy a hacer aquí una síntesis del libro, que recomiendo leer a todo aquel que busca una análisis preciso de los rasgos de la sociedad posmoderna.
Hoy tengo claro que soy tan posmoderna como cualquiera. Acá dos frases que me ayudaron a entenderme un poco más:
“El intercambio permanente hace que uno termine dedicándose a la cocina siamesa, o desee la jubilación, o promulgue las campañas a favor de la vida pastoral. A través de los demás comenzamos a valorar las harinas integrales, las novelas chilenas o la política comunitaria. (...) Así, a medida que se suman al yo los demás y sus deseos se vuelven nuestros, hay una ampliación de nuestras metas: de nuestros “debo”, nuestros “necesito” y nuestros “quiero”. Eso requiere atención y esfuerzo, y ocasiona frustraciones. Cada nuevo deseo plantea sus propias exigencias y reduce la libertad del individuo”.
“Al manifestar las opiniones uno se percata de que bajo el alero de su conciencia acechan otras voces subterráneas que lanzan un aullido burlón de desaprobación, como ocurriría con el “lobo estepario” de Herman Hesse. Ante este punto y contrapunto permanente (...) uno se da cuenta paulatinamente de que el monumento que había levantado a la objetividad tal vez fuera hueco”.Kenneth Gergen. "El yo saturado"
5 comentarios:
Sí, a mí también me ha gustado ese libro. Y sobre todo la bibliografía que aporta, que también es muy interesante.
Excelente Gergen y execlente que haya seguidores de lo que el plantea.
Considero que son verdades construidas, democráticas y que devuelven el sabor del buen análisis a las gastadas teorías de la estructura.
Felicidades por el descubrimiento
hace algunos años el doctor Gergen vino a mi escuela y nos quedamos perplejos con lo que decía, que bien que estemos en las mismas sintonías ciao
Pienso en las redes sociales y en las mil y una foras que tenemos hoy en dia de comunicarnos, de expresarnos, de intercambiar informacion. Es maravilloso, pero tambien desgastante. Creo que cuando el Yo se satura, se empieza a desbordar y se empieza a comvertir en "Nosotros", y empieza a dejar de ser "YO". Saludos!
Muy cierto David. Leí el libro cuando no existían las redes sociales (o al menos yo no tenía acceso a ellas). Y hoy estoy completamente desbordada por mi participación en Twitter, Facebook, Linkedin y Google +. Seguramente hoy Gergen tendría nuevo sentido para mí.
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