lunes, 2 de octubre de 2006

Dos años no es mucho. Quince minutos, una eternidad.

Me tomé mas de dos años para volver. Pero, aunque suene ridículo, a impaciente nadie me gana. Como olvidé nombre de usuario y contraseña, debí pedir que me la renvíen. No aguanté esperar los 15 minutos que decían. Así que abrí en el interin otro blog. Cualquiera diría: "Si esperaste más de dos años, qué necesidad de escribir ahora de golpe". Ninguna necesidad. Sólo quería mi blog funcionando de nuevo, y ya. ¿Para qué? Ah. Eso lo veremos mañana.

No hay comentarios.: